viernes, 31 de julio de 2015

Merecido premio para un Hombre Radio / JRP


La noticia se dio a conocer oficialmente este 30 de julio en la emisión estelar del Noticiero Nacional de Televisión. Después de muchos años mereciéndolo, al holguinero Sergio Antonio González Valero, locutor en activo de mayor edad en la radio cubana le hacían realidad uno de sus mayores anhelos al concederle el Premio Nacional de Radio.
“Muy merecido”. Esa es la frase que se le escucha decir a todo el que conoce de la buena nueva, sin dudas el mejor y más grande regalo que pudo recibir la CMKO Radio Angulo —la casa de Valero— cuando restaban pocas horas para el 1 de agosto, día en que la planta radial celebra el aniversario 79 de su fundación, creada por el mártir revolucionario y radialista excepcional Manuel Angulo Farrán.
A la CMKO llegó Valero siendo muy joven y hoy ya próximo a celebrar 87 primaveras, el orgullo no le cabe en el pecho al entregarle a su querida emisora y a su pueblo el más alto reconocimiento que otorga el Instituto Cubano de Radio y Televisión ICRT, algo que siempre deseó recibir en vida “para ponerlo en la puerta de mi casa”, así dijo en una entrevista concedida a Radio Holguín.
“Desde que estaba en el vientre de mi madre yo pensaba en hacerme locutor”. De esta manera definió González Valero su pasión por tan hermosa profesión en este fascinante medio que es la radio. Sergio Antonio González Valero, o simplemente “Valero” como lo conoce todo Holguín, nació en la Villa Blanca de Gibara el 19 de septiembre de 1928.
Cuenta Valero que con apenas 7 u 8 años pegaba el oído al antiguo radio de su mamá y que soñaba con ser él quien hablaba por aquel viejo equipo. Seguramente fueron esos sueños los que a principio de los años cincuenta lo impulsaron a irse a La Habana a estudiar locución, teniendo como base la preparación que le había dado el propio Angulo en un programa de su emisora.
Después de superar no pocos obstáculos y pruebas que venció con lo aprendido y su talento natural para la locución, en 1955 obtiene su Certificado de Aptitud como locutor, y un año después recibe su Diploma del Colegio Nacional de Locutores. Ya como locutor profesional Valero regresa a Holguín para entrar por la puerta ancha de la radio en una ciudad donde entonces existían cuatro emisoras.
En poco tiempo Valero se convirtió en una de las voces principales de la CMKF, y luego de la CMKO. Allí al decir suyo, tuvo el privilegio de vivir la efervescencia Revolucionaria. Sintió gran dolor con el vil asesinato de su amigo y maestro Manuel Angulo (9 de diciembre de 1957). “Angulo fue como un padre para todos los que hacíamos radio en esos tiempos, lo recordaré eternamente”.
Dice Valero que tampoco podrá olvidar la alegría del histórico primero de enero de 1959 cuando triunfó la Revolución cubana que ponía fin a una época de barbarie. Como buen revolucionario le brillan intensamente sus ojos al rememorar aquel 26 de febrero del propio 1959 cuando Fidel habló al pueblo holguinero desde el balcón de La Periquera.
“A mí me designó la CMKF para hacer la trasmisión desde donde hablaría el comandante. Recuerdo que en cuestión de minutos se congregaron miles de personas frente al edificio, y tengo el inmenso orgullo de que cuando él iba subiendo por las escaleras hacia el balcón le dije, comandante me permite saludarlo y me extendió su mano, eso nunca lo voy a olvidar”.
Como profesional de la locución, Valero compartió el micrófono con locutores de la talla de Consuelito Vidal, Cepero Brito, Manolo Ortega, y Eduardo Rosillo, pero hubo alguien muy especial para él, un artista de la palabra con quien se le puede ver en una vieja foto que exhibe con orgullo en la sala de su casa de la calle Cervantes, el maestro de maestros Germán Pineli.
En su largo camino por la radio, este locutor que no necesita de premios para brillar porque lo logra con creces con su talento, conquistó la cumbre de su carrera y el sincero reconocimiento social con un programa campesino devenido verdadero símbolo de la radio holguinera y cubana, Fiesta en el Campo, nombre oficial de “La Carreta de Valero”.
Muchos años han transcurrido desde que Valero pusiera sus pies por primera vez en una emisora radial. Hoy lleva dentro de su octogenario corazón el placer de haber hecho realidad el sueño de cualquier hombre, sentir el dulce sabor del reconocimiento de su pueblo, a esto le suma ahora el muy merecido Premio Nacional de Radio 2015, y lo recibe en vida como anhelaba este Hombre Radio.

martes, 28 de julio de 2015

Crónica para Alina / JRP


Esta es una de esas crónicas que nunca los periodistas quisiéramos tener que escribir, mas llega como un torrente al que hay que abrirle paso para que fluya y con él alivie la tristeza que nos encoge el corazón.
La cultura cubana está de luto, la noticia consterna a todo el que la escucha, es como si al fallecer la extraordinaria actriz Alina Rodríguez, hubiéramos perdido a un familiar muy cercano, y es que hasta cierto punto los artistas de la televisión gracias a su profesión y la magia del medio, se convierten en un miembro más del hogar.
Nunca olvidaré la primera vez que la vi siendo yo apenas un niño, entonces en la pantalla del “Krim 218” en aquella emblemática novela “La séptima familia” en la que Alina desempeñaba un rol villano, una mala que nunca olvidaremos, como tampoco podremos olvidar a una mujer fuerte y dulce como Justa en esa legendaria telenovela que por siempre será Tierra Brava.
Muchos son los títulos televisivos y cinematográficos en los que esta excepcional maestra de la actuación cubana dejó su indeleble huella, sin embargo es imposible no mencionar su magistral desempeño al encarnar la Lala Fundora de Contigo Pan y Cebolla, de Héctor Quintero o su más reciente personaje, la maestra Carmela en la cinta Conducta del cineasta cubano Ernesto Daranas.
Como nadie lo imaginó, tal vez ni ella misma, que este sería su último “papel”, Alina se creció y convirtió a Carmela en una verdadera clase de actuación. Una Carmela inmensa, orgullosa de ser maestra normalista, ferviente devota de la Virgen de la Caridad del Cobre y sobre todo una cubana de humanismo descomunal. Personaje que logró con ese talento que le ponía a cada rol, desde el más sencillo hasta el más importante, lo que hace mucho tiempo hizo a Alina entrar por la puerta ancha del teatro, el cine y la televisión cubana.
A cada televidente, amante del cine, de la pantalla chica o del milenario arte de las tablas le toca en la fibra más profunda del corazón el adiós de Alina, sin embargo, soy de los que piensa que los artistas cuando les queda justo a la medida ese título tan difícil de conquistar, nunca mueren, Alina Rodríguez sin dudas es uno de esos.
Su rostro de mujer fuerte y a la vez delicada, y esa sencillez que la acompañaba en la vida real, nunca la dejarán abandonar nuestra memoria. Nunca podrá decir adiós una artista de su estirpe, ahí seguirá en la pantalla que se la entregó para siempre a su público, ese público que hoy la despide con la lágrima incontenible pero también con el imborrable recuerdo de cada personaje al que le dio vida, sin dudas con toda su vida.

viernes, 10 de julio de 2015

Álvaro Torres, feliz de estar en Cuba / JRP


Estoy profundamente feliz de estar en Cuba, fueron las primeras palabras que dijo el popular cantautor salvadoreño Álvaro Torres, al llegar en la tarde noche de este jueves 9 de julio al Aeropuerto Internacional Frank País García, de Holguín, procedente de la ciudad estadounidense de Miami.

Al ser recibido por la prensa local en el Salón VIP de la terminal aérea, expresó que visitar otra vez la isla es la realización de muchos sueños y de alguna manera inconscientemente la recompensa de todo el trabajo que ha hecho a lo largo de muchos años. Sin saberlo mi música estaba llegando a este bello país de gente maravillosa tan romántica y ahora es como venir a recoger esa cosecha de los granos que he ido tirando poco a poco y que afortunadamente han caído en tierra fértil, enfatizó el cantante quien se autodefine como El último romántico.

En conciertos anteriores cuando ha estado aquí en nuestro país ha dicho que tenía muchos deseos de cantar en Holguín, por qué?

Saber que aquí en Holguín y en Cuba mi música ha formado parte de la historia de muchas parejas entonces yo vengo por esa recompensa, vengo a nutrirme nuevamente de ese amor que ustedes tienen listo para mí y que me darán a través de su presencia en mis conciertos, en mis presentaciones. Entonces vengo con un gran espacio en mi corazón para poderme llevar ese amor que ha estado esperando por muchos años. Esta vivencia que vamos a tener los próximos días 11 y 12 en Santiago, el 14 en Bayamo y 16 y 17 aquí en Holguín, en el Estadio Calixto García, yo espero que sea una experiencia única como lo ha sido desde el principio que empecé a visitar Cuba, siempre ha sido maravilloso, no tiene comparación.

Qué espera de este primer encuentro con el público del oriente del país, que se dice son personas muy sencillas y acogedoras.

Es maravilloso ver que no solo gente contemporánea conmigo sino mucho mayores y mucho más jóvenes comparten mi música ya sea porque las generaciones la han ido legando a su siguiente generación y para mí es realmente extraordinario ver a familias enteras disfrutando de mis canciones. De verdad mi corazón está listo para recibir ese amor y sobre todo para dar todo el que yo traigo a través de mis canciones.

Maestro tengo entendido que hay alguien de su agrupación que es de aquí de Holguín, o que tiene alguna relación especial con la ciudad, es así?

Sí, más de uno. Mi guitarrista principal Fidel Brizuela es holguinero, es un maestro al cual yo le agradezco que comparta conmigo todo su conocimiento y toda su destreza para tocar diferentes instrumentos. También mi percusionista Juan Pablo, que no estará con nosotros esta vez pero que le manda un abrazo muy fuerte a todos sus coterráneos. Pero mira que cosa tan bonita que durante los cinco conciertos que ofreceremos voy a estar acompañado por músicos holguineros muy talentosos según me han dicho. El maestro Danilo Mulet en el bajo, Juan Miguel San en los teclados y José “Faifer” Sánchez en la percusión y particularmente en los dos conciertos de aquí de Holguín voy a tener el inmenso orgullo de que también me acompañe el coro infantil Opus David, de la ciudad, esto seguramente será inolvidable pues trabajar con niños es algo precioso.

Estarán esas memorables canciones de su repertorio que el público espera y que se sabe de memoria.

Claro que sí, en mis conciertos no pueden faltar canciones como “abrázame, apriétame, acaríciame y bésame”, o “Nada se compara contigo”, o “si estuvieras conmigo como estás en mis sueños”… bueno son muchas las canciones que no pueden faltar y que todo el que vaya a verme las va a disfrutar tanto como yo al regalárselas de todo corazón. / Foto: Lázaro Wilson.